El Taxista Economista

- Buenas tardes maestro, ¿cuanto me cobras hasta Gamarra?-
- ¿hasta Huanuco o Parinacochas?- Preguntó el taxista economista
- me dejas en Bausate y Meza nomás-
- diez soles pues-
- algo menos pues maestro, para sentirme bien-
- no sale, hay mucho tráfico-
- nueve pues maestro-
- ya vamos-
Subí al taxi, puse mi maleta abajo, y el taxista me miraba por el espejo retrovisor, era un señor de unos  50 años aproximadamente. No me quise sacar los lentes de sol, porque estaba cómodo así, me relajé en el asiento y el taxista empezó a preguntar.

- ¿Usted trabaja en gamarra?-
- si, bueno no exactamente, pero me muevo por ahí (no quería darle mucha información)-
- yo antes paraba en gamarra, pero mande todo a la mierda, hice polos para la campaña de Fujimori, y también hice para Castañeda, pero es una cojudes- dijo el taxista, sin que yo le preguntara.
- a bueno si, hay temporadas en las que es insoportable- respondí secamente para que no siga
- mira amigo, acá solamente existen dos servicios;  la comida y el transporte, el resto, no pasa nada-
-a si, ¿usted cree maestro?-
-mire amigo, yo soy economista pues, yo le hablo con base, en el Perú no hay dinero-
-yo creo que si hay dinero, y trabajo también, puestos de trabajo, no hay, pero si hay posibilidades de emprender un pequeño negocio-
- no amigo, mire todo el mundo come y todo el mundo se moviliza, yo tengo mi cebicheria en breña, nadie compra ropa, compran con tarjeta, con eso de los créditos, la gente se engancha-
-pero maestro, yo vendo al contado- el taxista parecía que no escuchaba mis comentarios
- mire amigo, yo soy economista y tengo varios proyectos, ahí los tengo atrás en la maletera, son tres proyectos, uno no se ha quemado las pestañas por las puras pues, una vez los presente, pero estos conchadesumadres no quieren cambiar las cosas-
- es que son tantos proyectos maestro-
- jajaja oiga, mi proyecto es bueno, lo que pasa que ellos quieren seguir con las mermeladas, las cutras, este país no va a cambiar-
- si maestro entre ellos se tapan todo, todas las leyes se acomodan a su favor-
-claro pues, ya ves, ahora ya me entiendes, yo soy economista, egresado de la Universidad de Lima- y cuando dijo Universidad de Lima, me miro por el espejo.
- a esta bien, esta bien-
- yo le tengo que hablar así para que usted me entienda, porque si le hablo con palabras técnicas, no me va a entender-
- y usted como sabe- le respondí, pero en voz baja, tan baja que no escucho mi comentario, estaba claro que yo no tenia cara de economista, pero si de un perfecto ignorante en la materia.
-mire, yo voy a industrializar el huevo-
-¿el huevo?- le pregunte, pero esta vez, realmente estaba interesado
-así es- respondió
-y como pues maestro-
- no pues, para eso se estudia, ahí tengo el proyecto- y no quise preguntar mas, porque entendí que no me iba a revelar el secreto.
- y eso por un lado, por otro lado, voy a enlatar el cuy, bueno eso ya lo he hecho, incluso exporte a los Estados Unidos-
- es una buena idea maestro, pero hágalo rápido, no vaya ser que le roben la idea-
- no no, ya esta patentado, el que me robe la idea, se jode-

Ya estábamos por llegar, y el señor taxista, dijo, sin que yo le preguntara
- ¿sabe usted como voy a industrializar el huevo?
-¿Cómo?-
- en sachet- respondió y me miro por el retrovisor
- ¿huevo en sachet?-
- claro, las amas de casa solo abren el sachet y cae el huevo-
- ¿pero la cáscara? –
- la cáscara para el abono y para hacer ricocan-
- ha ya, es buena idea ah!- respondí como si estuviera impresionado, pero en realidad pensaba que el taxista economista estaba demente, que pasaría con la yema del huevo, si estaba en sachet, se reventarían las yemas, en fin llegue a mi destino y le dije:

- Bueno maestro hoy he aprendido algo nuevo, gracias-
- De nada amigo, para eso estamos, yo he ganado un amigo más- y me dio la mano, baje y le dije:
- Feliz Navidad-
- Feliz Navidad amigo y prospe… - cerré la puerta y le dije:
-Ya chao, ¡Loco!-