El Gran Día

Hoy empecé el día y no lo terminé.  Conseguí realizar algunas de las cosas que tenía previstas y dejé algunas pendientes. ¿Para cuando? - No sé.

Abrí los ojos con dificultad, quería seguir durmiendo pero no pude, y no por falta de sueño si no por la desagradable sensación de sentirme un holgazán.  Salí de la ducha cagándome de frió, bañarse con agua fría es bueno, dicen. Yo lo hago porque no tengo terma y cuando la tuve, me seguí bañando con agua fría, porque bañarse con agua fría es bueno, dicen.

Comí una taza de yogurt con cereal azucarado y dejé un poco para la noche. (Pensándolo bien debí comerme todo el cereal).

Salí de la casa apurado, pensando en que todos los problemas se van a solucionar (hay días  que nos levantamos optimistas y otros enormemente pesimistas), hoy es uno de esos días optimistas, no me levanté insulsamente tímido, todo lo contrario parece que será un gran día.

 Mientras camino al paradero le timbro a mi esposa y no contesta mi llamada como siempre. (Ella viajó a California en busca de oportunidades),  si todo sale bien el próximo año viajaré y estaremos juntos.

Voy acomodando mi día y anoto en mi agenda los lugares que visitaré hoy y mañana, tengo el día ocupado hasta las siete de la noche. “Es bueno saber que tengo algo que hacer y me gusta lo que hago” Pienso mientras viajo en el bus.

El día se me ha pasado volando, ya conseguí hablar con mi esposa, es bueno hablar con ella porque nunca se sabe si esta de buen o mal humor pero igual es lindo escuchar su voz. He estado escribiendo una carta para ella a puño y letra, esta noche terminaré la carta y hablaré con un amigo que tenemos en común,  que también vive en California,  para que le envíe unas flores en mi nombre por nuestro aniversario, todo saldrá perfecto.

Se acerca la hora de almuerzo y voy camino al barrio chino y estoy seguro que veré al chino seudo esotérico y exotérico estafador, un mentecato que presume leer la palma de la mano (en el fondo lo envidio porque se esta llenando de plata el chucha).

Creo que la decisión mas difícil del día es en que chifa comer, si mi presupuesto estuviera mas holgado comería hoy en el Wa Lok, es el mejor restaurante chino de Capón pero cada plato vale veinte soles aproximadamente y hoy no me daré ese gustito, así que comeré comida china hecha por un cholo en uno de los tantos chifitas que hay cerca, y probablemente salga renegando como siempre.

Desafortunadamente el chaufa estaba asqueroso, estoy seguro que juntaron las sobras del arroz para preparar ese chaufa que  más   parece   el   rancho   del   Real Felipe.

Tengo aún más cosas por hacer y el día no ha sido tan malo a pesar de ese menú lastimero, además hoy terminaré la cartita para mi amorcito.

Me subí al bus y conmigo un vendedor de llaveros que recién salió del penal y aprendió a hacerlos en prisión, mas adelante subió un señor que vendía ensartadotes de agujas a un sol y de regalo diez hilos de todos los colores, unos minutos después subió un señor de edad avanzada que se levantó la camisa y nos dejo ver su abdomen del que desprendía un cordón conectado a una bolsa en la que parecía contener pichi de un color extraño muy parecido al que tiene el emoliente sin alfalfa.

Recibí una llamada. Es urgente y debo llegar a mi destino en quince minutos y el bus tardará cuarenta minutos en llegar, me pongo de pie y aviso que voy a bajar, debo tomar un taxi para llegar en quince minutos, bajo apresuradamente casi en el medio de la pista, mi corazón se aceleró, crucé la pista y levante la mano para tomar un taxi, me pareció caro pero ya no tenia mucho tiempo así que me subí , le dije al taxista que me lleve lo mas rápido que pueda a mi destino, mi corazón latía tan rápido y arrítmico que por un momento pensé que el taxista también podía oírlo, acomode mis cosas y bajé la luna para que entre aire, sentía mucho calor, me sudaban las manos, por la ventana vi a gente empujando carretas, parejas abrazadas, ancianos esperando la muerte,   tantas   historias   parecidas   a  la  mía,  tantos   proyectos  e ilusiones   perdidas,  tantas   gentes esperando   terminar   el   día.

Pero algo me desconcentró, fue un sonido como de una trompeta desafinada amplificada alrededor del taxi, el horrible sonido duró aproximadamente cinco segundos, un segundo después vi algo y aún no se que fue, solo recuerdo que no pude contener la orina y un dolor indescriptible que afortunadamente duro poco tiempo (un par de segundos quizás), lo que si recuerdo es el sabor a sangre y lo relacioné a un sueño que tuve cuando era niño.

Soñé que estaba en casa de mi abuelo con toda mi familia y en las noticias hablaban de un avión que había perdido el control, en todos los canales se veía la misma imagen, mi familia y yo estábamos viendo la televisión, esperando el desenlace fatal y de pronto pude notar que el avión volaba cerca de la casa de mi abuelo, escuche un ruido estridente, vi la imagen del avión encima de la casa, una capa de sangre en mis ojos,  el   sabor   y  el   olor  a  sangre   fueron   tan   reales   como   lo   sentí   hoy.

No siento dolor, es como si no hubiera dormido por mucho tiempo, mi cuerpo se hunde y se deja llevar por una profunda sensación de relajación, me siento completamente laxado.

Estoy muerto y me preocupa como tomará la noticia mi madre.
Estoy muerto y no soy padre.
He muerto sin querer pero he vivido amando a una mujer.
Estoy muerto y todavía no lo creo.
He muerto sin terminar el día.
Estoy muerto sin una carta de despedida.
Me  extinguí  en  un  sueño, Expiré sin que me avisaran, Sucumbí y no dejé nada.

Sor Presa

Herman Valdivia es un travesti de 29 años, pasó toda su vida esquivando burlas. De adolecente por ser un afeminado, y de adulto por vestirse como mujer.
Su manera de caminar emulando a una dama, angustiosa y bamboleante, le ha traído surtidos problemas.


¿Es acaso el deseo de poseer o ser poseído por un hombre más fuerte que la propia familia, los amigos o el que dirán?

Herman salió del colegio un año antes, cinco meses antes de salir, recibió una golpiza por maricón, pero también allí fue donde tuvo su primer amor, semanas después que se descubrió su tórrido romance con el instructor de pre militar, fue expulsado del colegio, negándole la posibilidad de graduarse como los demás.

Herman salió del colegio mas loca que nunca, pocos días después de ser expulsado del colegio,  se aventuró a ir a una discoteca de ambiente,  acompañado de una amiga:  una compañera de colegio, que se había vuelto su mejor amiga, su confidente, la que le alcahueteaba todo,  Herman se soltaba las trenzas en la disco, bailába como una dama coqueta dispuesta y predispuesta a todo.

Meses después su círculo de amigos cambio,  travestis, lesbianas y todo tipo de tendencias sexuales.
Los términos que había insertado en su vocabulario,  y los códigos de ambiente con los que hablaba, estaban dando a Herman un estilo y personalidad con la que se sentía cómodo,  pero también era victima por instantes,  de la nostalgia y la amargura, porque extrañaba ser el niño que por un corto tiempo fué, un niño querido,  sobretodo querido y aceptado. Extrañaba desmesuradamente la mano de su madre peinándolo, acomodando su ropa y echándole colonia para después del baño.

Su familia le había dado la espalda,  él vivía en un cuarto alquilado, era una pieza de mala muerte, con humedad y bichos raros,  él era un bicho raro y daba la espalda muchas veces a una pieza.

Han pasado muchos días y noches. Herman esta más adaptado a su nuevo estilo de vida, los chispazos de nostalgia siguen perturbándolo,  y él sigue cambiando, ahora tiene tetas y un culo que muchas chicas quisieran tener, pero la misma voz de camionero, lamentablemente las hormonas no pudieron hacer mucho por sus cuerdas vocales.

Herman trabaja en una peluquería pulgosa y de mala muerte, con el dinero que gana paga su cuarto que más parece una ratonera,  Herman ha tenido una vida miserable que ha aprendido a sostener.

Son las ocho de la noche, es jueves, Herman fue a la tienda,  antes de llegar a su habitación, ha comprado sopa instantánea, una gaseosa helada, pan y jamonada simple, se quita los tacones y se dirige a su pequeña cocina improvisada, prepara su cena, se da un baño y luego se sienta en la mesita de madera que le obsequio la vecina , una mesita vieja y apolillada, (como la propia  vecina), él disimula la mesita vieja con un  percudido mantel de encaje, se sirve la cena viendo televisión, de pronto un frio congelante y traicionero lo hace pararse de la mesa y cierra las ventanas.

Herman se pone el pijama, se echa en la cama no conversa con nadie, ni comenta los programas, apaga la tele, reza y pide en silencio despertar mañana.

Amistad Condicional


Siempre hay algo que queremos o deseamos, sin querer, sin buscarlo. La amistad incondicional es una farsa, yo lo interpreto así, para facilitar las cosas e ir al grano.

Cuando digo que es una patraña, no estoy asegurando que sea premeditado, lo que quiero decir es que indirectamente tu amigo se ve en la obligación de asistirte y retribuir tu atención cuando él la necesite, porque son amigos y eso hacen los amigos.

Los amigos se hacen favores, pero también se los cobran. La amistad es condicional y temporal, la amistad no siempre es para toda la vida y los amigos que tienes hoy no serán los mismos de mañana. ¿Cuantos de tus amigos de hace cinco años crees que quieran verte o acompañarte algún lugar y a cuantos amigos del pasado buscarías hoy para pasar un buen rato?

He perdido contacto con mis amigos del colegio, esos amigos que pensé que serian para siempre y que tantas veces nos prometimos hacer reuniones de promoción, a ninguno veo mas, a ningún amigo de colegio extraño y cuando me los he encontrado por la calle de pura casualidad, he tratado de esquivarlos y si me los he topado, ya no eran tan graciosos como antes o talvez yo era un pelotudo que se reía de cualquier cosa, a algunos seguro me los crucé por la calle y nunca me di cuenta.

Terminé el colegio y me mude, conocí nuevos amigos y me volví a mudar. No extraño a ninguno de ellos.

En una temporada mi entorno inmediato o sea mis amigos se polarizaron, y los rumores, sospechas, miradas abominables, acusaciones, reproches, y malos entendidos me señalaron por un evento desafortunado que nadie se dignó a indagar que sucedió realmente.
La amistad no es incondicional pero muchas veces crea dependencia, si sueles salir con tu entorno inmediato y pasar buenos ratos y de pronto dejas de hacerlo sentirás la ausencia pero dura poco, la vida esta en movimiento, tu estas en movimiento tu entorno cambia y lo que te importaba antes ya no te importa ahora.

Tal vez ahora con los años y la experiencia, hayas aprendido ha escoger a tus amigos, eso se adquiere con los años, aprendiste porque quizás pensabas mal de alguien y se lo comentaste a un amigo y tu amigo se lo comento a todos tus amigos o porque presentaste a tu novia a un amigo y al mes ella terminó contigo y a las dos semanas estuvo con él. El punto es que ahora son pocos tus amigos.

Tengo una “amiga” que sueña con que todo sea como antes, y yo me empeño y aguarle la fiesta y lo disfruto tanto. Ella suele hacer llamadas o enviar correos electrónicos.

"Hey chicos, se va a realizar una parrillada en casa de Patricio, ya he coordinado con él por favor tenemos que reunirnos como antes, no debemos perder nuestra amistad, hemos pasado momento bacanes así que este domingo será el reencuentro, son 10 lucas por cabeza"

La reunión fue un fracaso, pocos fueron y los que fueron se marcharon rápido, uno porque tenia un almuerzo familiar – otro porque tenía un trabajo pendiente – otro se fue a embarcar a una amiga y no regresó nunca.

Sabes que flaca, ya nada será como antes, y es mejor así porque ya no me apetece que regresen esos tiempos, todos ahora tienen otras prioridades, algunos ya se casaron, otros viajaron, un par se suicidaron y otros simplemente ya no quieren recordar esos buenos tiempos.

En conclusión, la amistad es temporal o pasajera - por temporadas o períodos - sin querer, sin buscarlo nuestra amistad es Condicional (en algunos casos, intencional)

La amistad siempre ha sido así, aunque nadie hable de eso. La amistad es un “hoy por ti mañana por mi” el amigo siempre esta dispuesto a ayudar pero él confía en que cuando te solicite, podrá contar contigo, porque eres su amigo y cuando tu lo necesitaste él estuvo contigo y pobre de ti que no lo asistas o tengas la bondad de devolverle el favor.
Lo peor que puede pasar es que te saque en cara todo lo que ha hecho por ti y la amistad termine en una guerra de trapitos por el aire.

Perdí a un amigo, un amigo que dio mucho y recibió poco, pero nunca hubo reproches ni reclamos. Siempre feliz, siempre dispuesto, siempre tragón y dormilón.

Te Extraño Muñeco

Quiero Ser

Jorge Parodi (coquito) es un adolescente de 17 años, vive en barrios altos, unos de los barrios marginados de lima, barrio que por nada del mundo caminaría un sábado a las once de la noche.



La confirmación es una ordenanza religiosa que todo católico caótico debe vencerse, confirmar que ser católico es lo que realmente quiere para toda la vida, habiendo sido bautizado y recibido la primera comunión, la confirmación es un paso importante y urge realizar dicho ritual.


Los padres de Coco están preparando todo, cuidando sus bolsillos y escogiendo próvidamente al padrino de Coquito, las tías de Coco sugieren a un amigo de la familia que es gobernador de la cuidad y siempre que hay una actividad (pollada bailable) él se porta con las cervezas y los pollos porque el gobernador esta enamorado de Lucha la morena mas rica de la cuadra.

Listo. Coquito tiene padrino, atracó el tío, porque se lo pidió la negra Lucha, con esa culata de repisa y sus tetas paraditas no hay teniente gobernador, alcalde o senador que se cohíba. Y no es la primera vez que el excelentisimo gobernador es padrino, porque ya le bautizó el chico a la negra Lucha.


Solo falta una semana para la confirmación, los tíos, primos, amigos de familia y gorriones ya están a la expectativa del tono para el fin de semana, la gentita se esta asegurando con los falsos de coca, la tía Pocha pide las chelas que va a vender para el tono de la confirmación, el padre de Coquito se fue a la cachina a comprarse un saco para el evento, porque debe estar presentable para el día mas importante de su hijo y porque no decirlo también para él. Ahora que el gobernador será su compadre le tiene que dar una chambita y por fin dejar su oficio de controlador de combi.


Coquito se prepara para su retiro de tres días, se dirige a su habitación se arrodilla al pie de la cama, apoya sus codos en la cama, entrelaza sus dedos, cierra los ojos y conversa para sus adentros con su padre celestial


-padre mío Dios mío dame fuerzas y voluntad para ser tu siervo y cada día ser mejor, dame la sabiduría para perdonar a mis compañeros y entender que algunos elegimos este camino porque queremos y otros porque es una oportunidad para conseguir cosas-


Coco advierte que el piso de madera del umbral de su cuarto se hunde y rechina abriéndose la puerta repentinamente, Coco ya esta de pie, su padre esta parado frente a él, lo mira como quien mira a un extraño, lo escanea con la mirada.


- ¿que haces pelotudo, que hacías de rodillas? ¡Rezando! –


-No pa-


-a ya cuidadito no mas que estés con esas mariconadas-


-no nada que ver pa, estaba buscando mis sandalias-


- ya ya carajo préstame tus zapatillas que tengo una pichanguita con la gente del paradero-


Coco regresó del retiro, dentro de él sentía una satisfacción indescriptible, un sentimiento de haber asimilado fielmente el lavado de cerebro que para él no fue eso si no mas bien la voz de Dios quien le habló y abrió los brazos.


Coco no será un cura, y mucho menos un fanático religioso, Coco no quiere ir al burdel, Coco quiere ser casto hasta el matrimonio. Muchos pensamos que el catolicismo es una farsa, una corporación que nos sirve y servimos, la fe es darse el privilegio de vivir feliz creyendo que todo será enmendado. Muchos creemos en Dios pero no en los caminos que nos han insertado, algunos renegamos con nuestras madres y abuelitas porque les prenden velitas misioneras a sus santos, imponiendo nuestra forma de pensar o sentir pero realmente no cambiaremos nada ¿y porque queremos siempre cambiarlo todo? Por creer que lo sabemos todo.


Dejemos a Coco tranquilo, a las abuelitas, a los que prenden velitas misioneras, a las mamachas que nos agarran latigazos con las ramas de ruda, a los que se arrodillan frente a la iglesia, a los que visten de morado, a los que juran por Dios y por la patria.


Por mi parte quiero rendirme y evidenciar que mi única fe es la que siento cuando mi madre toda las mañanas me da la bendición y lo único que realmente voy a extrañar en mi corta vida es eso.



   QUE DIOS Y LA SANTISIMA TRINIDAD BENDIGA A TODOS menos a Augusto Ferrando

Principe, ¿sin Carro y sin Casa? Las Huevas Compare!

Sergio y Ricardo se conocieron en el barrio, a través de amigos en común, mas adelante la amistad se solidificó, gracias a los rasgos, cínicos y perversos en los que coincidían frecuentemente, la forma tan incisiva de criticar o comentar acerca de personas de su entorno y las bromas sutiles que Ricardo siempre pensó, pero nunca manifestó o si lo hizo, nadie captó la broma y mucho menos sonrió por compromiso.

Cuando tuvieron oportunidad de conversar por primera vez, fue con una botella de ron, entre palabras atropelladas y balbuceos, se cagaron de risa, hablaron de mujeres, comentarios lujuriosos y más trivialidades. Compartían el gusto por las buenas cosas, comida, perfumes, ropa, y coincidían en sus gustos por los lugares tranquilos, rústicos, acogedores, donde se puede uno tomar un trago sin que nadie te joda.

Se hicieron amigos mucho mas frecuentes, en los tiempos que no conseguían trabajo y, compartieron trabajos en dos oportunidades, en circunstancias muy diferentes la una de la otra.

La mejor época de laborar juntos, fue cuando trabajaban en la empresa de un amigo de su padre, era una especie de taller en el que se reparaban las congeladoras de una marca de helados muy conocida en el mercado. Ricardo venia buscando trabajo y regresaba a casa sin buenas noticias y con menos plata en el bolsillo.
Un domingo por la noche Ricardo recibió la visita de Sergio, diciéndole que había hablado con su padre y tenían que presentarse a primera hora en la empresa, los días posteriores estuvieron bien, “muy bien” tenían dinero, se sentían bien, incluso habían subido unos kilitos, la situación sentimental de Ricardo estaba mejor, porque ustedes saben que. Príncipe con novia y sin plata, ¡Las Huevas Compare!

Sergio tenía muchas conquistas, amores de verano, como marinero de puerto en puerto, o en este caso como pescador de malaguas, para ser más realistas. Pero así son las cosas, les fue bien por un periodo largo, pero terminó, como terminan las mejores películas y te quedas con la satisfacción de lo que disfrutaste, como un buen polvo, como cuando obtienes suministrarle un rico orgasmo a tu mujer, un verdadero orgasmo, no esos que con frecuencia tu mujer interpreta a la perfección en el tabladillo de tu habitación, en el que tu mujer asume el papel principal de la obra y tu el papel secundario pero no menos importante, el papel de huevón:   un huevón que se la cree y que se cree el actor porno, el superman, el mas pingón de la cuadra.

VACAS FLACAS, nuevamente Ricardo y Sergio se reunían en el parque hablando de sus “proyectos” fumaban unos cigarrillos colombianos que venían de contrabando y se vendían muy barato, hablaban de lo mismo de siempre, eventualmente visitaban a un amigo que era mochilero (Diego) y tenia una familia un poco loca, una hermana solterona, una abuela sospechosamente muy amigable con sus mascotas y su madre que con sus comentarios desafortunados los hacia sentir mas miserables de lo que ya eran.

Diego trabajaba para su madre, ella era administradora de una discoteca de coreanos. (Los coreanos invierten en lima en karaokes y antros de mala muerte en los que se cocinan la prostitución y drogas).

Finalmente Sergio y Ricardo, terminaron trabajando en la discoteca, irónicamente eran seguridad de la discoteca:  seguridad era lo que menos tenían y proyectaban, porque estaban tan flacos y en ellos dicho oficio era para cagarse de risa, tres semanas después abandonaron el trabajo.
Dos meses después, Sergio decidió estudiar en provincia viajó a Satipo y Ricardo
Había terminado con su novia (una vez más), pero media hora después se arrepintió.

Volver con él, no estaba dentro de los planes de la novia de Ricardo, insistió por un mes pero fue inútil, extrañamente a la siguiente semana le regalaron una perro, fue un evento que Ricardo supo manejar airosamente, atragantándose la pena.

Sergio llevaba cuatro meses en provincia, Ricardo también decidió estudiar, postuló a un instituto de carreras técnicas, ingresó como era de esperarse. Si es de paga todos ingresan. No hay duda.

Sergio regresaba a lima, para visitar, se encontraba con Ricardo para contarse sus eventos y chupar el rico trago corto que disfrutaban tanto, uno de los proyectos que Sergio contaba con tanto entusiasmo, era el de sembrar plátanos en unas hectáreas que le habían prestado, Ricardo estaba asombrado de cómo estaba progresando su amigo, lo felicitaba cada cinco minutos (efectos del alcohol) terminaron esa noche ebrios como de costumbre, dos días después Sergio viajó de retorno a Satipo.

Dos años pasaron después de la última vez que Ricardo vio a Sergio. Ricardo ya estaba terminando su carrera técnica, había tenido algunos amoríos de verano, un par de romances fortuitos, hasta que finalmente volvió a enamorarse. Estaba trabajando con un primo abogado, al que Ricardo ayudaba con ciertos trámites, en pocas palabras un Papeluchero.

Una mañana Sergio visitó a Ricardo, se saludaron, hicieron un par de bromas y Sergio empezó a hablar sobre su proyecto, tenia la mirada fija, la mirada impaciente, del que quiere llegar rápido, Ricardo supo captar en el sus ojos el convencimiento absoluto que sabia lo que quería y no importaba como, lo importante es llegar.

A Sergio le habían propuesto sembrar marihuana, el negocio consistía en una cosecha, solo una le habían dicho que necesitaba para poder hacer un capital para cristalizar su proyecto (sembrar plátanos).
Eran tres lo que entrarían en este negocio, Sergio, el Gordo y otro contacto que se les unió en lima. Ricardo persuadió a Sergio de abandonar la negociación, que podía ser peligroso, pero Sergio no dio paso atras, así que continuo y cuando llegaba a lima le comentaba a Ricardo, sobre los avances, ya no hablaba de marihuana y ni de merca, se refería a la droga como Pollo, un pollo era un kilo de marihuana, así que, Ricardo ya resignado y desconcertado aún por la decisión de su amigo y, con la terrible sospecha de la desgracia, abandonó sus consejos y dejó de lado el papel de moralista, se acostumbro a los códigos y cuando Sergio lo visitaba, Ricardo le preguntaba por los pollos.

8 de febrero, cumpleaños de la madre de Ricardo. En su casa se aderezaban platillos para la fiesta.
Tocaron el timbre y Ricardo miro por la ventana.

Sergio estaba parado en la vereda, pálido, casi transparente con una sonrisa impostada, su apariencia era como si sospechara algún desenlace terrible e inevitable. Es como cuando te subes a un tren y sabes que no puedes bajar hasta que el tren se detenga, era un pasajero en un tren subterráneo, con asientos de cuero desgastado, gentes con bultos, costales llenos de ilusiones, muñecas y carritos de juguete con llantitas de plástico y en el fardo de Sergio habían semillas de plátanos, zapatitos de bebé con roponcitos de color celeste.

Ricardo bajó se saludaron y lo invitó a pasar.

No acá nomás mas bien te invito algo de comer y de pasada conversamos - SERGIO
Puta pero es cumpleaños de mi vieja – RICARDO
Un toque nomás tengo que contarte una huevada – SERGIO
Salieron a un restaurante y comieron algo ligero, luego caminaron al parque, que a esas alturas y dadas las circunstancias más parecía su centro de operaciones.

Habla ps huebón ¿que fue de los pollos? – RICARDO
Puta he traído los pollos, he venido con el Gordo y ya nos pusimos de acuerdo con Santiago (el tercer contacto) – SERGIO
Chucha donde los tienes, ¿cuantos pollos son? - RICARDO
Son dos pollos, pero ese Gordo es un huebón se anda paseando con los pollos, los tiene en el departamento de su prima en una bolsa de Metro, esta huevada ya esta que me pone nervioso – SERGIO
Puta madre deshazte de eso de una vez, no te vayan a cagar huebón– RICARDO
Si pues, ya quiero vender esa huevada, ya tenemos el contacto, mañana iremos para quemarlo y de ahí te busco pa tomarnos unas chelas – SERGIO
Jajaja ya pues, oe vamos yendo que tengo que estar para en cumple de mi vieja – RICARDO

Al día siguiente Ricardo salió a comprar el pan y vio a Sergio con El gordo y Santiago caminando hacia la avenida, Sergio advirtió que Ricardo estaba en la panadería y se retrazó mientras que el Gordo y Santiago lo esperaron unos metros mas allá, efectivamente el Gordo llevaba una bolsa de Metro y casi Ricardo podía oler a esos pollos gordos, despepados y desmoñados.

Oe te busco mas tarde, o ¿quieres ir? Será al toque nomás – SERGIO
No, voy a tomar desayuno, me buscas nomás – RICARDO
Ya OK hablamos – SERGIO

Sergio se ausentó tres días, Ricardo pensaba que quizás se había emborrachado con sus amigos o quizas ya estaba en Satipo.

Esa mañana fue a buscarlo un conocido del barrio (Cabeza de Burro), Ricardo bajó sorprendido porque nunca habían hablado tanto como para que lo busque a su casa.

Habla brother – CABEZA DE BURRO
Habla que fue – RICARDO
Ahí ps brother, ¿oe que sabes de tu pata Sergio? – CABEZA DE BURRO
Nada ps, ¿porque? – RICARDO
Puta loco compra el periódico El Trome – CABEZA DE BURRO
¿Porque, que pasa? – RICARDO
A tu pata y a dos huebones más, los han chapado con merca, salieron en la sección de policiales – CABEZA DE BURRO
Conchesumadre!! –RICARDO

Ricardo subió a su casa sacó plata y corrió al kiosco, estaba asustado se sentía mal, la respiración se le hacia difícil, cuando pagó por el periódico le temblaba la mano, al mismo tiempo se sentía aliviado de no ser él quien estaba en esa situación.

“Cae banda de micro comercializadores de hierba, al rededor de las 9am, en las inmediaciones de la cuadra 2 de la AV. La paz, fueron capturados, Omar Sarmiento (45) alias el Gordo – Sergio Contreras (28) alias Platanito – Santiago Gonzáles (32) alias El Chato. A la banda se le encontró 2 kilos de marihuana, fueron capturados gracias a el seguimiento que se les venia haciendo por efectivos de la policía, no se descarta la posibilidad que haya más miembros de esta banda. Continúan las investigaciones. Dicha banda venia distribuyendo a San Martín, San Miguel y Comas”


Nota:  La frase Titulo del post fue extraida de una pelicula peruana de los 80s
             La Fotografia fue extraida del forosegundaguerramundial    http://www.forosegundaguerra.com/viewtopic.php?t=2941

Beatle Man


La moda de la Beatlemanía, bandas tributo,conferencias, discos tributo,  covers, muestras, politos, documentales, programas especiales, pósters, temas en la radio, en versión folklore andino, Los Beatles en versión bossa nova, en versión punk, En versión música de cámara, homenajes aquí, allá y aculla.
El público Masivo y Complaciente descubrió que eran una banda original, (mucho más que cualquier cosa que aparezca en la tele o en la radio hoy en día), el mercado vio el negocio y los puso de moda, y ahora escuchar a los Beatles es “De Culto”.
Además de estar bien harto de esta moda  – que a estas alturas me parece patética - quisiera agregar una opinión puramente personal, pero que estoy seguro muchos compartirán: los Beatles no son taaaan buenos. Es más, por momentos me parecen sumamente cuadrados y escuchar más de tres temas de ellos me aburre excesivamente.
Ellos realmente no cambiaron nada, fueron una banda comercial de la época, sirvió de referencia para muchas bandas posteriores pero hubieron otras bandas y, muy buenas como Steppenwolf, Grand Funk Railroad, Humble pie, The Guess Who, Cactus, Faces, Blue Cheer, Rare Earth, The Beach Boys, etc.
Esta es una opinión puramente personal y tendenciosa.

Transfuga y Corrupto ahí esta el Gusto


Eran días fríos, no solo por la humedad corrosiva que oxidaba las ventanas, si no también por las hostilidades por ser el mas bueno de la campaña electoral, el que tiene la sonrisa mas cínica gana: sonrisa dibujada minuciosamente por un dentista franelero, un dentista hacendoso dispuesto a todo.

Eran las elecciones presidenciales, los spots publicitarios se apoderaban de la programación.

El 8 de abril de 2000, en una primera vuelta electoral muy cuestionada Fujimori obtuvo el 49.79% contra Alejandro Toledo con 40.39%.
Toledo pidió la postergación de las elecciones pero el Jurado Nacional de Elecciones la rechazó. Toledo, retiró entonces su candidatura y Fujimori participó en la segunda vuelta sin adversario. Mi situación laboral no era la mejor, en realidad no tenia situación laboral, si no mas bien una Situación, nada laboral.

Un tío tránsfuga, tan tránsfuga como mujeriego o quizás mas mujeriego que tránsfuga, me sugirió que sea personero, mi tío tenia el cargo de coordinador o algo parecido, le caían unos centavos mas por ese cargo, el reclutaba gente para el partido. Yo había sido personero antes y sabia que uno se lleva un sencillo sin hacer absolutamente nada, mi primera experiencia como personero fue por el partido de Toledo. Hasta ahora no se cual es el papel del personero, si todo es un relajo, el personero va temprano firma un libro y, luego se retira a su casa a tomar desayuno y no regresa hasta la tarde para cobrar.

Esta vez la propuesta de mi tío era tentadota, serian S/ 40 por ser personero del Chino Rata, acepté de inmediato, mi Situación iba de mal en peor (al menos tenia un techo y un plato de comida)- como dijo en una oportunidad la mamá de un amigo. Ella era administradora de una discoteca, un antro de mala muerte de propietarios coreanos. Es necesario recordarles, que los coreanos tienen debilidad por las vulgaridades y perversiones sexuales. Unas joyitas estos chinitos tan lindos.

Un amigo y yo visitábamos a nuestro amigo, el de la mamá administradora de antros, en una oportunidad su mamá nos abrió la puerta, nos saludó con amabilidad y, contó sus proyectos y los de sus hijos. Su hija se casaría con un europeo y su hijo viajaría por el mundo. Nosotros escuchábamos y esperábamos su interrogatorio, de pronto preguntó:

¿Y ustedes chicos que hacen?
¿Qué proyectos tienen?
Bueno... Yo, lo que se diga proyecto proyecto, No tengo- dije a secas, era el turno de mi amigo, que se mordía los labios para no soltar la carcajada.

Bueno, Yo-dijo y quedo pensativo y un silencio absoluto se sintió
Nada-dijo y nos reímos y rápidamente nos pusimos serios.

-Al menos tienen un techo donde dormir y un plato de comida- dijo la señora de los proyectos. Yo me pregunto si su proyecto no será casarse con un coreano.
Su comentario no fue muy alentador. Meses después estábamos trabajando en la discoteca y eso ya es otra historia.

Acepte ser personero, tenia que asistir ocasionalmente a la base del partido, siempre iba tarde y me paseaba por los pasillos,  observada todo y a todos los optimistas desempleados en su mayoría, unos sujetos inmaculados, vestidos con el traje de la moralidad, un traje alquilado por todo el periodo que dure la contienda. No notaban mi presencia y, talvez lo único que querían era mi voto o quizás todo era una pantalla porque ya se sabia quien iba a ganar.

Llegó el día, yo había hecho mis planes, me levante un poco aturdido, me lave la cara como gato y fui a cumplir con mi deber cívico. Indiscutiblemente no iba a votar por el Chino Rata, me divertí dibujando penes en las caras de los candidatos y deposité mi voto en el anfora, firmé un libro de asistencias y regresé a mi casa a tomar un rico desayuno, pasé el resto de la tarde viendo tele y tocando guitarra, a las 5.30pm, regresé al lugar dónde me correspondía votar, al llegar encontré a un grupo de personas que estaban allí por la misma razón, para cobrar los viáticos que no habían prometido

Los comentarios respecto a que el chino había ganado se escuchaban en todas partes, yo solo pensaba en mi plata, caminé hasta la base, cuando me encontraba a pocas cuadras pude ver una gran cantidad de gente que estaba estacionada en medio de la pista, los autos no podían pasar, ya estaba oscureciendo y algunos sospechaban que no les pagarían, vociferaban - mi plata—chino estafador-corrupto de mierda-
Media hora después llegó un auto con lunas polarizadas, unos decían:
-allí viene el billete- -paga pe oe – le gritaban a uno de los hombres que bajaron del auto.

Quince minutos después estábamos subiendo con DNI en mano, firmando un padrón y recibiendo nuestros S/40, era evidente que ese dinero no era una donación para la campaña, ese dinero era del estado y se había invertido lo necesario para la reelección de Chino Rata.

Soy un corrupto Fujimontesinista, me declaro culpable, recibí dinero sucio, no debería estar sentado en este chifa, comiendo un chaufa de langostinos, devolveré los cuarenta soles, aceptaré mi condena, llévenme donde el Tío Vladi y el Chino Rata, quiero comer lo que ellos comen, platillos exquisitos, comida gourmet y las mejores bebidas. Eso es vida, viva el chino y la nueva
mayoría.
!
Imagen chifa jakie chan fuente--> http://www.ceroenpublicidad.com/

El Buen Cortés



El Buen Cortés interpreta bien su personaje, con una nitidez impresionante mientras atiende dolientemente a su verdugo parlanchín.

Caminába por la vereda de todos los días, por la que siempre hay que caminar para esperar el bus. Mientras camino  respirando el aire puramente contaminado, doy una gran inhalada como quien toma fuerzas para empezar el día, cerca al paradero hay una tienda cómoda y acogedora, es necesario entrar para tomar una gaseosa helada, y en botella de vidrio, así sea invierno. Cuando estaba apunto de entrar, mientras pensaba en las cosas que tenía que hacer y planeando minuciosamente mi recorrido con una charla interior impresionante, alguien me palmoteo la espalda y me sacó a sobresalto de mi conversación interior en la que estaba sumergido, como cuando te despiertan bruscamente de un sueño profundo.

Un impertinente personaje al que ya había evitado en otras oportunidades.

-Hola compadre - dijo el impertinente - puta madre- pensé y respondí de inmediato -¿hola loco que tal y?- solté ese saludo sin pensarlo mucho porque esta insertado en mi chip
-acá pues compadre con harta chamba, hemos cerrado un contrato con una nueva empresa, para publicitarlos en la revista, pero es canje, ya que chucha pe, algo es algo- dijo con cara d haber logrado algo importante - Mierda ya me cagué, ¿y mi gaseosa? tamare, habla rápido huevón!!- pensé mientras él hablaba como cotorra - A bacán bacán, y ¿a que se dedica esta empresa?- pregunte con voz gentil, diciéndole lo que el quería escuchar, a pesar que yo sufria en silencio -es un restaurante vegetariano, hacen unos jugos bravazos, almuerzos, cenas, hasta hacen buffet vegetariano, tienen sucursales- dijo,  y a mi que chucha, no sé como van a manejar ese canje, acaso vas a regalar vales a los de la imprenta, a los diseñadores y redactores, los obligaras a comer platillos desabridos, a comer carne de soya. Si son vegetarianos y no comen carne, entonces porque le llaman carne a una masa de soya- pensé esto mientras él me hablaba y en verdad quería decírselo, pero no seria gentil, así que lo escuche aparentando mi interés en el tema, pero mi mente volaba.

¿Como nos sacamos de encima a estos caballeros impertinentes?, ¿Porqué algunas personas sienten que deben contarme toda su vida?.

Esa tarde viajaba en la combi, tratando de encontrar una solución a un problemilla, mirando por la ventana, al menos eso parecía desde afuera. Yo estaba con la mirada congelada, a punto de resolver mi conflicto y un tipo que había estado sentado junto a mi por largo rato, me saludó.

-¿Hola amigo, puedo hablarte un momento?- habló el tipo con cara de gay -Nooooooo- pensé,  No dije nada porque no sabia que decir, porque este impertinente tenia un volumen increíble en su voz y cuando me habló, muchos pasajeros voltearon a mirar. Me preguntó si yo creía en Dios, con esa terrible mirada: la mirada de la razón, de la verdad absoluta, con un libro en la mano, me sirvió una sopa de letras, que me comí sin objetar. 

Viva el Perú Carajo




 Los criollos de antaño reviven sus glorias y cada año con menos fuerza salen de sus sarcófagos con los bigotes pintados y el pelo engominado. Quieren  sopa caliente y todo licuado.


Salen los criollos, con la cara pintada de rojo y blanco y el pecho inflado de purito orgullo, con las mismas canciones, nadie compone nada nuevo, nadie lo hará, se acabó.
Los restaurantes están llenos, la atencion es lenta, los canales en cadena, los comerciales cursis, chicas A1 con polo peruano, los circos mexicanos, los animales sufren,  los hostales caros, ya no hay feria del hogar  ni salón de los espejos, los bigotes, las chelas, las guitarras, los cajones, los negros, la bulla, los choros, vacean tu casa, la pintura, los estrados, las escarapelas csm, el algodón dulce, Augusto Polo Campos a punto de llorar, el ambiente se torna gris, los juegos caros, agosto misio, los frejoles con seco, las putas cobran caro, la AV. Brasil con cachacos y caca de caballo, el protocolo, los taxistas, coca cola se aprovecha, los chilenos celebran en sus tiendas ancladas en tu tierra.

Cuchillo Machete Limon


Cuando cumplí  trece años,  empecé a perder  progresivamente el interés en jugar con mis primos, nuestras vacaciones la pasábamos juntos en casa de la abuela.

Mi abuela tenía un carácter comprensivamente vidrioso y, como no serlo, si todos los nietos iban a su casa desde muy temprano a robarle los relámpagos de tranquilidad. 
Para suerte de nosotros vivíamos convenientemente muy cerca, Beto, Liz y Carlitos, vivían a dos cuadras y yo vivía a cinco cuadras, llegábamos sincronizados a casa de la abuela, para plasmar nuestro portentoso talento para el ocio; jugar con la tierra de las macetas, subir a la azotea para jugar con las gallinas que mi abuelo engordaba con esmero, detonar con cohetecillos las viejas paredes devastadas por los años.

Por las noches jugábamos en la calle hasta muy tarde, nuestros juegos favoritos eran:  las escondidas, lingo y mata gente. (Añoro la energía que teníamos por esos días)  lo único que importaba era jugar y  esperar el domingo. Los domingos el abuelo, nos daba la propina, a golpe de las siete de la noche ordenaba a mi abuela que saque la cartera del ropero, tarea que mi abuela desempeñaba a regañadientes, era un ropero viejo y sus bisagras lloriqueaban, a nosotros ese llanto era una calida vocecilla angelical que nos advertía para precipitarnos al comedor a paso ligero.  Estábamos parados en fila india en el comedor, estacionados estratégicamente frente a la puerta de la habitación de los abuelos. Mi angustia se incrementaba al ver salir a mi abuela con la vieja cartera de cuero con asas de metal , de ella se veían salir los fajos de billetes, que mis abuelos convenientemente habían decidido ahorrar en casa, los billetes se conservaban aún con el cintillo que le ponían en el banco y,  el olor a nuevo,  la propina se repartía de mayor a menor  y,  en lo que canta un gallo rompíamos filas corriendo saltarines y exitados a la tienda de la esquina.

Así transcurrían mis días de verano. En vacaciones  recibía la visita de mi primo Michel, el era tres años mayor y,  su afición por el fútbol era desmedida, el solía desaparecerse varias horas y al volver con los brazos y las piernas chorreadas por el sudor, contaba con entusiasmo su participación en algún campeonato de barrio, pero ya por esos días mi interés por el fútbol se desvanecía, lo único que disfrutaba era patear la pelota al arco imaginario que dibujábamos en la pared de la casa de mis abuelos.  Mi primo Michel y yo, disfrutábamos ese juego particularmente porque una vecina de edad avanzada, que vivía a tres casas de la de nuestros abuelos,  se sentaba en una silla vieja y reposaba el almuerzo.
Mi talento para el fútbol era imperceptible, digamos que ya el hecho de patear la pelota era suficiente y,  para ser sincero, yo no pedía más y,  para que más, digo ahora, si el fútbol es una escuela de metros sexuales y delincuentes machistas agresivos. Mis jugadas brillantes y deplorable talento, eran el preámbulo del acontecimiento mas importante de la tarde, por alguna razón inexplicable mis piernas no respondían a mis ordenes y,  siempre me salía un pelotazo desviado, una bala perdida que tomaba rumbos desconocidos, uno de ellos podía ser el techo de la casa y, el otro, el mas frecuente, el más esperado de la tarde, era ver la pelota aproximarse hacia la vieja de la silla, eran minutos interminables ver la pelota girar en el aire, era delicioso, digno de participar en un programa de videos graciosos, mientras esperábamos el fatal desenlace, mi primo gritaba para darle mas emoción al evento, Cuidadooooo
la pelota caía de bruces sobre la señora, quien parecía esperar con hidalguía, lo que la hacia sentir viva, mi primo soltaba la carcajada cachacienta y reventábamos de risa, mientras tanto la señora se ponía de pie maldiciéndonos, sacaba un cuchillo de la cocina y amenazaba a la pelota mirándonos a los ojos, esperando nuestros ruegos y lamentaciones,  pidiendole que le perdone la vida a la pelota, que no lo volveríamos a hacer, que nos la entregue. Tras nuestras humillaciones ella nos tiraba la pelota y nos arreaba para que juguemos mas allá, en otras oportunidades nos había desinflado algunas pelotas, se había ensañado, atravesando el cuchillo en su pechito saltarín, sus ojos enrojecidos parecían ver en la pelota nuestros pechos frágiles.

Un día intente jugar en el equipo de barrio, sentía que talvez podía ser parte de ese equipo y,  que no seria muy difícil patear la pelota y meter un gol y, que todos  me feliciten, que sea una pieza clave en ese equipo, después de todo había disparado algunas tardes, unos certeros pelotazos a la vieja de la silla, le dije a mi primo y a sus amigos que no sabia jugar muy bien y ellos respondieron:

--es una pichanguita, normal nomás chochera--
--a ya piolarespondí

Comenzó la pichanguita,  la pelota no llegaba a mis pies, yo corría en varias direcciones, dando la apariencia que sabia lo que hacia, me acercaba al arco y esperaba un pase para definir un gran gol, a pesar que hacia esfuerzos pidiendo la pelota, nadie se atrevía a pasármela (porque no querían arriesgar la jugada seguro, pero yo  no perdía las esperanzas) y,  llegó por fin el momento esperado, mi primo me dio un pase, la bola venia hacia mi, era mi oportunidad para demostrarle a los chicos del barrio que yo era tan bueno como ellos, sentí una emocion indescriptible, mis piernas flacas esperaban la pelota corriendo sobre mi sitio como reflejo de ansiedad, la pelota estaba delante mió, tome aire incline mi cuerpo hacia la izquierda, abrí mis brazos para dar mas equilibrio a mis movimientos, solté la gran patada con mirada furiosa, todos me alentaban y echaban porras

ya chibolo yaaaaaa, ya carajo!, pateaaaaaaaa!, pateé la pelota y al mismo tiempo solté un grito de poder aaaaaaaaaaaaaaaaaaah conchaesumadre! La bola se precipito algunos metros arriba del arco, sentí mucha rabia, pero no podía ser tan malo, el próximo tiro me ligaría dije para mis adentros, los reproches e insultos no se hicieron esperar
--la cagas chibolo de mierdadijo uno --¿que haces huevon que haces?-- Preguntó otro, yo no sabia que responder, estaba decepcionado, seguí jugando y,  esta vez tenia que demostrar  que podía meter un gol, pero para mi mala suerte los siguientes ataques fueron mas desafortunados y los insultos se subían de tono.

--puta madre que se vaya este chibolo-- vociferó uno
--pero es una pichanguita pe-- dije
--calla huevon que pichanguita ni pichanguita, no jodas vete!!—dijo

Salí de esa cancha recogí mis ilusiones, las cargue en el bolsillo y caminé hasta mi casa,  con la promesa que jamás volvería jugar una pichanguita.

Recuerdo que para el mundial España 82, mi abuelo y mis tíos se reunían a ver el fútbol, instalaban un televisor grande en la sala,  ponían unas cortinas oscuras y,  se sentaban atentos al televisor con sus miradas hipnotizadas, yo caminaba despistado por delante del televisor y gritaban quita de ahí carajo!

Ese mismo año mi primo Beto, que era contemporáneo con mi primo Michel, estaba interesado en otras cosas, el no regresaba a las 6 de la tarde sucio y sudoroso, mas bien todo lo contrario, a esa hora salía recién bañado y oloroso, bien vestido, provisto de su cajita de chiclets y unas monedas para gastar. Empecé a interesarme más por las salidas nocturnas y perdí el interés por los juegos de niño. Tenia cierta afinidad con mi primo Beto,  porque compartíamos el mismo gusto por la música, escuchaba indochina y muchas veces venia a la casa del abuelo cantando, pero un día me sorprendió, me hizo escuchar un casette que había grabado de la radio, era un compilado; Cindirella, Bon Jovi, Poison, Skid Row, Stryper, lo escudábamos incansables una y otra vez y,  le subíamos todo el volumen al toca casettes, un día trajo del colegio un casette de una música estridente,   pero muy interesante, era un casette de Sodom- In the sing of evil – 1984, una banda alemana, el cambio fue radical,  porque yo venia escuchando el  Pajaro Loco, Michael Jackson, A que kiko, Timbiriche, Menudo y otros grupetes que mi padre me mandaba de Venezuela.
La admiración por mi primo creció y mis gustos musicales cambiaron radicalmente, algunas veces lo acompañaba en sus salidas nocturnas, yo trataba de confundirme entre sus amigos, ellos hablaban de chicas guapas y,  las cosas que les harían si las tendrían en sus manos, algunos de ellos ya tenían enamoradas y mi primo no se quedaba atrás, ya que el tenia un talento innato para conquistar chicas, yo en cambio no había tenido enamorada, pero si contacto con el sexo opuesto ,se podría decir que a mi corta edad ya conocía ciertas cosas que otros niños ignoraban. Pero esa es otra historia.

Todos los chicos que eran mayores que yo, tenían sus novias y mi primo también, un día me adelante a la casa de la enamorada de mi primo, él me había mandado con un recado y quería que me quede con ella hasta que él llegase.  Ella era, o es, rubia, robusta y guapa, se llamaba, o se llama, Ursula, tenía 16 o 17 años aproximadamente y yo apenas 13, ya teníamos cierta confianza,  porque no era la primera vez que acompañaba a mi primo. Esa noche conversamos en la escalera de su casa, no recuerdo de que hablábamos, ella movía sus labios rojos e inflamados y acariciaba su cabello dejando desvanecer sus dedos entre las fibras de su pelo rubio, yo estaba relajado me sentía en confianza e imaginaba las cochinaditas que mi primo hacia con ella, de pronto ella me pregunto:

--¿y tú has chapado con alguien?—
-- claro, tsssrespondí desinflándome como quien dice. Obvio flaquita esa pregunta ni se pregunta.
--¿a Si?, ¿y con quien?—repreguntó
-- con una chibola de la cuadra donde vive Betorespondí.

Lo cual era cierto,pero me incomodaban sus preguntas, porque mi primo y yo hacíamos campeonatos para ver quien duraba mas besando a su respectiva chibola, no importaba quien ganara,  la cosa es que estábamos chapando y, no  podia delatar a mi primo.

--jajajaja ¿y como chapas?—preguntó, con una voz burlona
--¿como chapas tu? repregunté
--a ya, quédate ahí nomás sentadito y cierra los ojosdijo

Y se acerco con su aliento lujurioso, debo admitir que me moría de miedo porque era mayor que yo,  pero ese beso riquísimo me laxó por completo y,  me sobrevinieron unas ganas desconocidas de hacerla mía,  pero mi pequeño cuerpo seria incapaz de domar a esa mujer y,  entendí que eso solo era un juego, éramos amantes de paso, lo nuestro no podía ser, era un amor prohibido (eso pensaba yo),  ella solo atinó a acariciarme el pelo y arrojarme una mirada de ternura. Cinco minutos después entro mi primo con un cigarrillo en la mano y masticando un chicle con una sonrisa de galán de telenovela, pero mas parecia una version peruana de los New Kids on the Block.
Se saludaron y ella lo abrazó como si nada hubiera pasado entre nosotros, yo me aleje un poco para darles privacidad.
 Días después ellos habían decidido que yo debía tener una enamorada, así que planearon todo con sumo cuidado y me dieron a escoger entre dos chicas que me señalaron de lejos, las dos eran guapas de pelito castaño, una era mas alta que la otra, Karen y Andrea, yo no quería tener enamorada,  pero si quería ser como los amigos de mi primo, tenia que tener una noviecita para no estorbar a los demás.

Una tarde me dijeron que ya estaba todo arreglado, yo me habia decidido por Karen, me gustó particularmente ella por su carita de niña buena y,  su pelo ensortijado color castaño,  además su estatura era la mas conveniente,  aunque parecía tener mucha mas experiencia que yo, a pesar de su corta edad.

Esa misma tarde tenía que declararle mi amor, el amor que no sentía.  Allí estaba ella con sus amigos, entre ellos había un chico amanerado, que hacia las veces de alcahuete,  mi primo y su novia me miraban desde el balcón y me daban indicaciones que yo rechazaba.

--ya anda al toque nomás, vamos mándate y te la chapasme decían
--ya carajo, no jodan. Como si no supieradije

Tenia que cruzar la calle y caminar algunos metros y plantarme allí de bruces sobre el pavimento, las manos me sudaban, sentía la mirada de Karen y sus amigos, como si supieran a que iba, la mirada de mi primo y su novia,  ya me encontraba  a medio camino, a paso firme, quería regresar corriendo a mi casa,  pero no podía,  finalmente llegué,  me estacioné tres metros delante de ella,  me sentía vacío, era un desalmado (vi como mi alma salio despavorida  y muerta de miedo), mi cuerpo estaba mas frió, mi garganta seca ya no producía saliva, mis piernas temblaban, estaba pálido, me arme de valor y le dije con voz temblorosa:

-Karen podemos hablar en seguida se escucharon gritos y silbidos burlones
-¿me dices a mi?—preguntó, como haciéndose la cojuda, esta expresión me dio mucha rabia,  Si, a ti perra, pensé
--Si un ratito nomásdije, se puso de pie y camino hacia mí, los gritos y burlas no dejaban de sonar
-- vamos al frentedije.

Me dio un besito y caminamos hacia un edificio, en el camino le hacia preguntas tontas y cuando por fin llegamos le dije:

--hay que sentarnos acá—

Estábamos en uno de los escalones del edificio, estaba oscuro y hacia frió, el piso estaba frió muy frió, tome sus manos, ella advirtió el sudor de mis manos y me soltó rápidamente, se hizo un silencio estremecedor, no sabía que decir para romper el hielo, pero algo tenia que decir, así que tenia que ser directo.

--quieres estar conmigodije
--ya puesdijo

Me proyecté sobre ella como una bestia salvaje y nos besamos por largo rato, su aliento a menta me embriagó, quizás desde ese día no soporto ver a las chicas masticar chicle. Después de besarnos nos pusimos de pie, gracias le dije y, hasta ahora  no se porque dije eso.  Ella bajó rápidamente las escaleras y me dijo: chaooo, con su miradita coqueta de perrita obediente.

Al día siguiente me levanté un poco tarde, me sentía cansado y,  recordé que tenia enamorada, pero no quería verla, tenia que hacer algo para deshacerme de ese compromiso, así que opte por ausentarme y evitar acompañar a mi primo.
Había descubierto que mis manos sudaban cuando estaba expuesto a situaciones incomodas, estaba seguro que el fútbol no era mas que un miserable juego, en el que participaban una manada de hombres primitivos, había descubierto el amor por la música y,  perdía progresivamente mi entusiasmo por jugar con mi primos, era evidente que ya estaba entrando a otra etapa de mi vida y, estaba resuelto a descubrir cosas nuevas en los próximos años.

Paz inverencial


Hace aproximadamente trece años, practicaba Gnosis, práctica que he venido postergando hace muchos años, quizás porque mis demonios terminaron apoderándose de mi voluntad para ser una mejor persona, debo confesar que gracias a la Gnosis, pude manejar un suceso insípido en mi vida, precisamente por manejar totalmente despersonificado, gracias a una dieta rica en cannabis y alcohol.

Éramos un grupo de gentes un poco locas, paranoicas y rebeldes  por conviccion,  habíamos decidido rebelarnos en contra de todas las doctrinas y  religiones llenas de buenas intenciones, pero necesarias para nuestra sociedad:   en estas inglesias hay de todo;   altares, imágenes imponentes, cánticos celestiales, agua bendita, excepto Dios.
Nos rebelamos contra los dogmas, contra el padre nuestro de paporreta, queríamos experimentar y comprobar.
Concurrían todo tipo de personas; ex evangelistas, ex católicos, ex mormones, ex masones, ex militares, ex de algunos amigos, curiosos, gente solitaria que tal vez aspiraban ser miembros de un club de amigos, esquizofrénicos sedados, libidinosos, gente joven y no muy joven, señoras neuróticas, madres solteras, mujeres abandonadas, homosexuales reprimidos que huyeron humillados en silencio,   porque para el movimiento la homosexualidad era una forma de  involución.

Los objetivos básicos era conocer, admitir y destruir a nuestros demonios, mediante el auto análisis minucioso de nuestras emociones, esta practica tan difícil y necesaria para conocernos, es la única forma para evitar hacer o decir barbaridades, y evitar así,  el humillante hecho de ir a contarle a un cura o líder de alguna secta religiosa,  nuestros pecados y debilidades. Otra de las prácticas era, el desdoblamiento astral, técnica que, no sé, si me sirvió de mucho,  pero fue muy divertida.
Otra práctica frecuente era contactar con extraterrestres y para ser sincero, nunca hicimos contacto con alguno, y dudo habrían tenido conocimiento que pretendíamos contactarlos,  pero  estábamos llenos de optimismo y  ensayábamos nuestro saludo para cuando llegase la hora,  viajábamos todos los sábados a una playa llamada Chilca, ubicada al sur de Lima, se dice que dicha playa es la preferida de los extraterrestres, porque en ellas podían cargarse de energía.
A estas alturas de mi vida ya no creo en los mitos, solo se que hay energía en todas partes  y  es lógico pensar que otros seres pueden habitar el universo,  pero nunca los he visto, y sospecho que nunca los veré,  lo único que esta probado es que,  se ha  lucrado mucho al respecto.

Una madrugada dormía placidamente, soñando con una doncella que complacía con devoción mis bajos instintos sexuales, con una mística adoración al phalo, mirándome etéreamente y esperando sumisa una ráfaga de semen en su piel de porcelana,  y de pronto alguien me despertó violentamente, desperté de mala gana y desorientado, traté de ver quien se había atrevido a sacarme de ese sueño, que aún no había terminado.

Escuché una voz que me dijo:

--despierta , son los hermanaos mayores--(era mi primo con quien compartía la habitación y compartíamos también los estudios gnósticos)

--Hermanos que!!-- respondí
--los hermanos mayores, levántate vamos a la azotea— dijo, con voz calmada
--¿como sabes?— pregunté
--no sé, estaba durmiendo y desperté de la nada, algo me dice que debemos subir a la azotea, es una señaldijo

Y lo dijo con tanta seguridad, que en su mirada pude notar que hablaba en serio, ya había llegado el momento que tanto habíamos esperado, de inmediato me despabilé, me puse  zapatillas, una casaca y subimos. Era invierno y la neblina suele bajar y velar la visión, conforme íbamos subiendo la niebla se hacia mas contundente, cuando llegamos no podía creer lo que estaba viendo, era una esfera luminosa muy grande y estaba flotando sobre un parque cerca de nuestra casa, había una luz que se desprendía de la base de la nave hasta el suelo, un frió estremecedor me invadió,   era un OVNI,  limpié mis ojos de las legañas y me concentré en lo que estaba viendo, quizás estaban siendo abducidas algunas personas a través de esa luz, a pesar que la neblina no nos permitía ver bien, era evidente lo que estaba pasando allí ( por mi cabeza pasaban muchos pensamientos, que pasaría con mi familia, quien alimentaría a mi perro, si mi primo y yo estábamos a punto de ser rescatados de este planeta autodestructivo a punto de hacerce mierda, que pasaría con nuestras familias), todavía no salía de mi asombro, estaba pasmado y  mi primo dijo con una voz calidad y llena de sabiduría:  Hagamos el saludo   (El saludo consistía en extender el brazo derecho y hacer una señal con los dedos, índice, medio y anular).

--paz inverencialdijimos con total convicción que venían por nosotros.

De pronto la niebla empezó a disiparse, mi angustia se incrementaba, tenia la boca seca y unas ganas contenidas de orinar, porque lograría ver a las personas subiendo por aquella luz que se disparaba del Objeto Volador No Identificado, para mi sorpresa cuando la neblina se despejó lo único que identifiqué es que era un Objeto,  pero no era volador,  lo que nos había jugado una mala pasada en complicidad con la espesa neblina de la madrugada, no era mas que un gran poste que sostenía un faro esférico con reflectores alrededor de él,  un miserable poste de los tantos que se habían instalado en medio de todos los parques del distrito probablemente esa misma tarde, una broma pesada,  de mal gusto, un capricho en el que la naturaleza había confabulado contra nosotros.

Todavía no sé si fue una broma, o si mi primo se había levantado a caminar para conjurar a algunas entidades negativas como solía hacer, y vio el supuesto OVNI  y  claro, convenientemente no me dijo toda verdad. Lo único que sé, es que a partir de esa noche,  deje de creer en los hermanos mayores.

Soy un borracho sin capital




Un día desperté con la inquietud de incursionar en el divertido mundo textil; telas, colores, hilos, remalles, pinturas, mallas, etcétera. Influenciado por algunos chicos, influenciados también por alguna loca argentina o un loquillo español que introdujo en el mercado una tendencia subversiva en contra de la moda masiva de los grandes almacenes de ropa, que justifican su victoria vistiéndonos a todos igual, como hermanos gemelos y arriesgándonos a encontrarnos con algún hermano No reconocido en la combi.  Somos hijos putativos de un dictador de la moda  y debo reconocer con humildad mi derrota por haber comprado algunas prendas allí  y,  peor fué el bochorno cuando tuve un encuentro cercano, No del tercer tipo, si no más bien del primer tipo, el  tipo que me crucé en la calle con la misma casaca que yo vestía.

Provisto de un pequeño capital que mi madre me había prestado y  que naturalmente aún no le he pagado,  sin saber por donde comenzar,  le comente mi inquietud a una amiga que estaba en mi lista de contactos del msn, habíamos chateado varias veces,  contándonos cosas frívolas y compartiendo nuestros gustos por la música, le dije que quería hacer polos, que sabia que en gamarra podría comprar la tela, pero necesitaba saber algo de telas, a ella le pareció  paja ,  me dijo que me pondría en contacto con su enamorado,  porque él hizo polos alguna vez y quizás podía ayudarme.

Y asi fué

Nos reunimos más rápido de lo que pensé, (no se,  sí  fue  por celos o por el simple afán de querer conocerme),  llegué gracias a un croquis y unas referencias confusas, tan confusas como mi nuevo amigo.
Emprendí mi largo viaje en el viejo dinosaurio, la línea 94 que me lleva a campoy.
Llegué con cierto temor porque no conocía el lugar, en el camino pensaba que todo podía ser una emboscada y,  me quitarían todo el dinero que llevaba.   Al llegar con los zapatos llenos de polvo,  conocí donde vivía y me pareció bastante amplio,  conversamos de todo; música, sexo, mujeres, hombres, hombres que querían ser mujeres, mujeres que querían a mujeres y de una posible sociedad que nunca se concretó.  Todo acompañado por un potente equipo estereofónico y unas refrescantes chelas heladitas lo justo!!
Amanecí en un sillón con el aliento avinagrado, el clásico sentimiento de culpa y la promesa que jamás volvería a beber de esa manera tan endemoniada,  rápidamente me senté en el sillón abochornado porque había vomitado el riquísimo seco de cabrito del almuerzo anterior y  la hermana menor de mi amigo de copas, me dijo: limpia tu buitre.  Regresé aturdido a mi casa, me conecte al msn y  descubrí que había sido victima de una travesura que me pareció muy ocurrente, me habían cambiado el nick,  ahora era 
"un borracho sin capital"

Ya se me estaba acabando el dinero y  no se concretaba la sociedad,  y  tampoco me presentaba al famoso costurero de polos del que me había hablado tanto, quizás por la pereza la cual moraba en su cuerpo como un inquilino con un contrato de alquiler venta, que finalmente terminaría por apropiarse de su vida.

El 24 de diciembre del mismo año,  mí amigo perezoso y yo,  el más holgazán, que luchaba por divorciarse de ese defecto,  porque ya me acercaba tímidamente a los treinta, y  los treinta se acercaban a mí,  a paso largo y con mirada vengativa.
Fuimos esa mañana a la fabrica donde conocería al joven de los polos, llegamos con cámara fotográfica en mano para capturar algún evento gracioso y ser lo mas impertinentes que pudiéramos ser. Los trabajadores lo saludaban con cariño, estaban celebrando con sus familiares la navidad con un panetón de marca desconocida en una mano y en la otra un champagne Noche Buena, a una temperatura inapropiada para dicha bebida.  Mi amigo de copas correspondía sus muestras de afecto induciéndolos a que abran su champagne, petición que ellos no podían negarse aunque quisieran. En ese momento me di cuenta que solo habíamos ido para chupar.

Horas después estábamos ebrios sentados en una banca afuera de una tienda con muchos amigos (amigos que no había visto nunca en mi vida y que no volví a ver más),  tomé una foto a un meón desesperado y creo que fue la mejor foto de ese año, mi amigo ebrio y lunático,  dejó caer la cámara,  me enfadé con él por ser tan irresponsable,  siendo yo el mas irresponsable de los dos.  Me di cuenta de la hora, ya se acercaba la navidad eran aproximadamente las seis de la tarde y ya no podíamos seguir bebiendo tan lejos, asi que decidímos irnos de inmediato.  Esa navidad yo la iba a pasar solo,  porque mi madre y mi abuela viajaron al norte.

Cuando llegamos a su casa, comimos algo, no recuerdo si bebimos más,  pero lo que si recuerdo,  es que todos se fueron a celebrar la navidad en casa de su abuelita. Eran aproximadamente las 11pm,  yo estaba sentado frente a la computadora,  no había nadie en su casa,  en el patio estaba Don Juan (no se llamaba Juan, le decían así por pendenciero), él estaba cocinado un lechón, que lo comerían en noche buena, cuando regrese la familia para continuar la celebración, a mi ya me había pasado el efecto del alcohol y, me sobrevino una nostalgia inexplicable, quería salir de allí corriendo, extrañaba la navidad cuando era niño en casa de mi abuelo. Salí de la casa me despedí de Don Juan, me pidió que me quede,  pero ya no quería estar allí,   caminé hasta la avenida,   espere a mi dinosaurio y viaje con melancolía,  pensando en todas las cosas que podrían hacerme sentir más triste. Extrañe a mi ex, que me había abandonado por otro hombre, extrañé a mi madre y mi abuela,  porque estaban lejos, extrañé a mi Padre,  bueno a él lo sigo extrañando.
De pronto suena mi celular,  era el pelotúdo de mi amigo que se había olvidado de adoptarme por una noche buena, quería que tome un taxi hasta la casa de su abuela para celebrar la navidad,   pero ya era navidad y  yo estaba en el microbús celebrando mi patética noche buena,  que resulto ser malísima. Aunque pude ir decidí quedarme en mi sitio,  porque había estado mucho tiempo bebiendo lejos y prefería estar cerca de mi casa y  también tenia que bajar de la azotea a Baxter mi perro,  que probablemente estaba llorando de miedo.

Mi propiedad privada



Hace unos días retornaba adormecido a mi casa, sentado en ese enorme dinosaurio, una maquina imponente, que me arrulla una hora y media de regreso a mi distrito húmedo, frío y gris. De repente reconocí en un paradero, a una vieja amiga, no tan vieja y tampoco eramos muy amigos, en realidad una joven de 19 años de mirada amable, fotogénica y, que evidentemente nunca seria capitana de la selección de voley, dado que la naturaleza había sido mezquina con ella en cuanto a su estatura, (la conocí hace cinco años a través de un amigo músico), de pronto abordó el microbús en el que yo viajába resignado, y recordé un evento semanas atrás:
"Caminaba por una avenida y alcancé a verla subiendo a un bus, vestida con ropa deportiva y un maletín. A lo lejos logré ver que no tomó asiento y permaneció parada en el pasadizo frente a los pasajeros, lo cual me desconcertó y conmovió al mismo tiempo, ya que lo ultimo que supe de ella es que se dedicaba al oficio mas antiguo y, me pareció plausible verla vendiendo probablemente enciclopedias desactualizadas"

Una vez montada en mi viejo dinosaurio que emponzoñaba la cuidad con su aliento, se presentó cordialmente ante los pasajeros, entre los que me encontraba yo agazapado,  ella prosiguió con un discurso aprendido en un curso acelerado de oratoria callejera, con un tonillo a vendedor de gomitas, de inútiles ensartadores de agujas ahorradores de tiempo y deliciosos productos golosinarios.   Para mi sorpresa no vendía nada, se arrojó al escenario improvisado, interpretando una canción criolla de letra posesiva y despechada, al terminar el recital urbano agradeció con una reverencia esperando un apoyo voluntario, quise darle una moneda, pero preferí evitarle el bochorno.   Dos días después la encontré en el msn, la saludé, fuí amable y ella también, le ofrecí, conseguirle un trabajo, quizás en una tienda de ropa, le dije que no le prometía nada, pero que le avisaría si había algo, al leer ella mi texto, lleno de buenas intenciones, respondió con una risa cachacienta (juajuajuajuajuauaaa), y me dijo:
"tu crees que yo voy a trabajar en una tienda 12 horas diarias para ganar una miseria, pudiendo ganar  50 soles diarios en mi trabajo momentaneo" De inmediato y sin pensarlo dos veces le pregunte si necesitaba un acompañamiento de guitarra.